La respuesta, en mi opinión, es que claramente sí que se puede. Al menos, hay mucha gente que pone mucho interés y énfasis en conseguirlo, ya que los resultados pueden valer la pena si el equipo de audio esta en consonancia…
Primero, ¿que significa eso de acondicionar el salón? Acondicionarlo consiste en modificar su acústica, los materiales, los objetos y las formas de la sala, para lograr el entorno ideal para la escucha.
Cual es el entorno acústico ideal para la escucha?
En teoría, el entorno ideal para reproducir música grabada, sería un entorno anecoico. Esto es, sin reverberación alguna. Así de esta forma, oiríamos la reverberación exacta a la registrada en la grabación original, o sea, el entorno de reproducción no añadiría nada de reverberación por su cuenta.
Esto es muy complicado de conseguir, casi imposible. Lograr un entorno que no reverbere a ninguna frecuencia es tan difícil, que los laboratorios, fabricantes y estudios de ingenieria tienen que contruirlos especificamente para siquiera intentar aproximarse a ese objetivo.
Para hacernos una idea, y experimentar una sensación parecida, de forma improvisada, todos podemos probar unos buenos auriculares de orejera.
Aunque la reverberación no es nula, sí que es mucho más reducida que la de casi cualquier sala. Asi nos podemos imaginar como sería el reconstruir el entorno acústico de forma más similar al original de la grabación, mediante la ausencia de la reverberación añadida por nuestra sala de reproducción, esto gracias al uso de auriculares.
Buscar esto, sería el ideal teórico en cualquier salón, sala de escucha de un estudio, etc. Como todos sabemos, la reverberación colorea y desdefine el sonido a diferentes frecuencias dependiendo de las caracteristicas de la sala, favorece la instalación de ondas estacionarias, desvirtua la recreacion del espacio sonoro original, etc
Como no se puede conseguir ese ideal de ausencia de reverberación, lo importante es reducirla, disminuir el tiempo de reverberación (el tiempo que tarda el sonido en desvanecerse completamente al cesar el origen del sonido), y lo que es igual de importante, lograr que ese tiempo sea similar a todas las frecuencias. Si no lo es, tendremos lo que se denomina coloreo (salas calidas, salas frias, etc)
Cuanto más nos acerquemos al objetivo de reducir la reverberación, y conseguir un tiempo similar en todas las frecuencias, mas fiel será la recreacion acústica original. Pero esto tambien puede conllevar grandes incovenientes y difcultades:
– En una sala poco reverberante, se convierte en mas crucial la orientación de los altavoces, que han de estar situados justo dirigidos hacia los oidos, a la altura de la cabeza, en la posicion tipica del «triangulo regular entre altavoces y cabeza». Esto es mas critico cuanto mas anecóica sea la sala, donde las frecuencias mas directivas no llegarian de forma adecuada a los oidos si los altavoces no están dirigidos hacia nosotros. En salones normales, con reverberación y altavoces no perfectamente orientados, parte de estas frecuencias llegan al oido mediante reflexiones, pero con una imagen espacial distorsionada, y todos los contras que conlleva la reverberacion.
– Solo escuchamos la potencia de emision directa entre altavoz y oido. Todas las emisiones en el resto de direcciones, acaban desaparecias en la «trampa» acustica de las paredes. Esto significa que la sonoridad que percibimos es mucho menor si la sala tiene menos reverberacion. Lo cual no es malo, pero necesitaremos un equipo sonoro mas potente de lo que necesitariamos en una sala reverberante.
– Si la sala es muy grande, y conseguimos acondicionarla para reducir la reverberacion al minimo, puede provocar sensacion de extrañeza, hasta de incluso mareos! cuando la gente entra por primera vez en la sala. Esto ocurre porque el cerebro ve una sala grande, pero el oido no percibe la reverberacion que espera, la reverberacion que prevee acorde al tamaño de la sala. Esto provoca mareos y desconcierto en algunas personas. Imaginemos una gran iglesia, o un polideportivo, en el que cae un vaso al suelo, o botamos un balon, y no se oye ni una reflexion en absoluto… Eso marea y desconcierta al cerebro. En una sala pequeña, hay menos probabilidades de que esto ocurra.
– El PERO mas importante, es que las posibilidades de conseguir reducir la reverberacion, y conseguir una reverberacion igual en todas las frecuencias, o sea, una respuesta plana de la sala, es casi imposible en un salon convencional. Podemos conseguir un tiempo de reverberacion por ejemplo de 0,25 segundos en frecuencias de 10 KHz en un salon, pero conseguir lo mismo en frecuencias graves es casi imposible, ya que para atenuar y absorber las frecuencias graves son necesarios mecanismos diferentes que los que se usan para altas frecuencias, y no es facil implementarlos en un salón.
Como decimos, conseguir este ideal teorico de «no reverberación» es imposible en un salón o recinto normal, y solo se puede aproximar en sala anecoicas.
Entonces, qué es lo que podemos hacer para mejorar las circunstancias acusticas de un salon o recinto?
Lo que nos queda, es intentar llegar a un compromiso con todas estas vairables, para conseguir la mejor inteligibilidad del sonido posible.
– Reducir la reverberacion del salon.
– Conseguir un tiempo de reverberacion mas igualitario entre las diferentes frecuencias.
– Eliminar en lo posible las ondas estacionarias.
– Modificar el entorno acustico para conseguir subsanar la posicion de nuestros altavoces.
– Optimizar el SPL percibido, respecto a la reduccion de reverberacion de nuestra sala.
– Otras variables, como estética y factor «HWHL» (Happy Wife, Happy life…)
Con estos objetivos en mente, cada persona ha de decidir qué puede conseguir, y que quiere conseguir, para su salón. Una personas querran sacrificar el SPL que perciben, para conseguir mejor entorno sonoro. Habrá otras que no querran sacrificar espacio para conseguir atenuar las ondas estacionarias, etc. Aqui es donde entra en juego el factor hobby, el factor técnico, la practicidad, y la curiosidad y afán por conseguir un mejor resultado del salon al que estamos acostumbrados.
REDUCIR LA REVERBERACIÓN
Como resumen, se podría decir que hay diferentes posibilidades y tecnicas para reducir la reverberacion de una sala.
Lo que hay que conseguir es reducirla, y que ademas quede equilibrada. Esto es, que en todas las bandas de frecuencia, el tiempo de reverberación sea lo mas parecido posible, lo que hara que la sala sea mas plana. No valdra de nada reducirlo en ciertas frecuencias, y que haya gran difernecia con otras. El remedio puede ser peor que la enfermedad: sala mas coloreada, fatigante, excesivamente cálida o fría, etc
Para conseguir reducir el TR, y conseguirlo equilibrado entre frecuencias, lo ideal es hacerlo mediante procedimientos técnicos, con instrumental de medición de precisión, y diferentes técnicas que podremos ver más adelante.
Pero tambien se puede pretender aproximarlo a oido, invirtiendo tiempo y experiencia. Pero lo que parece ilusionante, puede convertirse en una empresa dificil, cuanto más mejora se quiera obtener. Eso si, a veces conseguir sutiles mejoras, puede no ser tan dificil, y valer la pena según las circunstancias.
Absorción del sonido
El objetivo es absorber el sonido que incide en las paredes, y que se transforme en calor. Esto se logra mediante el uso de materiales y resonadores adecuados.
Para absorber altas frecuencias, lo mas efectivo son los diferentes materiales y tejidos: Modificar, añadir o quitar: cortinas, alfombras, sillones, espuma absorbente, placas sonoras, etc
Cada material tiene diferentes propiedades: por ejemplo las cortinas gruesas absorben frecuencias altas y medias, unas mas finas se limitaran al rango mas alto. Añadir un sillon pesado puede ayudar tambien a absorber frecuencias medias-bajas, etc
Siempre hay que tener en cuenta que un material que añadimos o quitamos con un objetivo concreto, afectara a mas cosas de las que pensamos. Por ejemplo, añadir un sillon para reducir la reverberacion a frecuencias medias, tambien reducira la reverberacion un poco a frecuenias altas, y eso puede desequilibrar nuestro objetivo de conseguir la misma reduccion del TR a todas las frecuencias.
Para absorber frecuencias bajas, poco harán los materiales y tejidos absorbentes. En este caso son necesarios sistemas resonadores, dobles paredes, planchas de pladur, etc. En este sentido, hay muchisimo de lo que hablar, que en futuros post podremos ir viendo. Pero como ejemplo de la lo dificil que es absorber las bajas frecuencias, valga que algunos estudios construyen dobles paredes, incluso con desacoplos arquitectonicos entre un nivel del edificio y otro, casi nada…
Para absorber las frecuencias medias, pues como todo el mundo imaginará, es un compromiso de las dos situaciones anteriores: Un absorbente grueso será mejor para absorber frecuencias medias que uno fino, ya que este último hará una labor más localizada en en rango alto de las frecuencias.
Como vale mas una imagen que mil palabras, aqui un ejemplo de unos paneles de absorcion de lana de roca, y la curva de absorción por frecuencias dada por el fabricante:
AUMENTAR LA DIFUSION SONORA
Cuando reducir la reverberación al máximo, y posicionar las altavoces en el punto exacto e ideal, es imposible de conseguir en cualquier recinto (que no sea totalmente anecoico), el objetivo se centra en conseguir una buena difusion para evitar las reflexiones focalizadas que desvirtuan la recreación del espacio sonoro original, y asi mismo, optimizar el Nivel de Sonoridad respecto a la recreacion sonora.
Esto se consigue mediante difusión sonora. La difusion consiste en modificar la trayectoria de las reflexiones y dispersarlas de una forma mas natural respecto a la que se da en una sala cuadrada de muebles planos…
Para conseguirlo, hay difusores muy complejos, calculados en base a secuencias matematicas MSL de aleatoriedad, que a pesar de ser elementos que se pueden instalar en paredes planas, consiguen difusiones muy aleatorias y naturales a determinadas frecuencias:
Una forma sencilla y casera de empezar a mejorar la difusión, es convirtiendo el entorno de nuestra sala en algo más complejo e intrincado para la propagación del sonido. Añadiendo adornos, figuras, cristalitos que cuelgan de las lamparas… Todo tipo de objetos sólidos que difundan el sonido a diferentes frecuencias, siempre que se haga con objetivos claros. Hay un mundo tambien dentro del ambito de la difusión sonora, y pronto tendremos la oportunidad de hablar de ello también.
Como ejemplo, que algunos habremos podido constatar alguna vez in situ, pensemos en una iglesia románica, con sus paredes lisas, y formas simples y diáfanas, en contra de una iglesia barroca, con todas esas retorceduras, detallismo y relieve en los adornos y arquitectura. Imaginémonos el sonido en su interior. En la primera será mas reverberante y cavernoso, y las voces se entenderán peor. En la segunda, en la barroca, sera mas natural, menos focalizado, mas equilibrado, gracias a que sus complejas formas difunden mejor el sonido y ayudan a su absorción.
REDUCCION DE ONDAS ESTACIONARIAS
Otro aspecto que hay que mejorar en un salón, si no conseguimos tener una sala anecóica (que como hemos visto, va a ser que no…), es la disminución de ondas estacionarias.
Que son las ondas estacionarias?
Es la instalacion de reverberacion del sonido entre superficies paralelas, que por constructividad y destructividad acústica, provocan valles y picos a determinadas frecuencias (modos propios de cada sala), y hacen que el sonido se coloree de forma diferente dependiendo del sitio en el que nos situemos de la sala.
Este problema es uno de los mas perjudiciales a la hora de reproducir sonido en recintos cerrados, y con el que todos convivimos casi sin darnos cuenta.
Es muy perjudicial, porque no es fácil subsanarlo en un salon, y porque su coloreo, aunque muchas veces no es notable, perjudica el resultado sonoro, tanto en puntos de valle como de pico, segun nos desplazamos por la sala. Según en que punto de la sala estemos, la respuesta de la sala tiene diferentes irregularidades.
Suelen afectar a frecuencias medias y bajas, ya que las longitudes de onda de estas frecuencias son las mas tipicas de instalarse entre las paredes de salones y recintos.
Sobre esto hay mucha miga tambien, asi que aqui tenemos más tema pendiente tambien para el futuro.
La forma de reducirlas, es evitar que se instalen estas ondas entre paredes paralelas, y para conseguirlo hay dos formas:
– Absorber el sonido en las paredes, para que no regrese y se instale contra la pared contraria. Cosa que es difícil como deciamos, debido a lo difícil que es conseguir que se absorban bajas frecuencias en un salón. Este aspecto lo tienen mejor los salones que tengan paredes de pladur, etc, que hacen la funcion de resonadores. En estos afortunados casos, puede que el pladur de las paredes favorezca menos la creación de ondas estacionarias que una pared rígida, pero también puede que su frecuencia de absorción no sea la que nos haga falta reducir. Aunque en general, una sala con paredes de pladur, tiene mejores condiciones en este aspecto.
– Romper el paralelismo entre paredes. Este es el ideal. Si no hay paredes o techo-suelo paralelos, no se pueden instalar estas ondas (que es la causa de las ondas estacionarias), y acaban moviendose por el entorno como el resto de ondas de todas las demas frecuencias. Muchos habremos visto muchos cines o auditorios con las paredes en forma de cuña o ángulo. Pues bien, el objetivo es éste, reducir el paralelismo entre paredes, suelos y techo, y evitar la instación de ondas estacionarias. De ahi que en algunos buenos cines, la reproduccion de sonidos graves sea bastante limpia (aparte de todo el resto de cosas bien hechas que pueda tener el cine en cuestión)
Espero que esta introducción al mundo del acondicionamiento acústico haya sido de utilidad, y que cuando menos, servirá para iniciar muchos otros temas de los que surgen y que están implicados en el mundo de la acústica de salas.